Los orígenes del Centre Psicopedagògic Mare de Déu de Montserrat se remontan a 1947, cuando la sobreocupación del psiquiátrico de Sant Boi de Llobregat (Barcelona) impedía proporcionar una atención adecuada a las niñas con discapacidad intelectual. Esto llevó a la Congregación de las Hermanas Hospitalarias del Sagrado Corazón de Jesús a buscar un nuevo emplazamiento donde poder trasladarlas y evitar, así, que permanecieran hospitalizadas con las enfermas mentales adultas. Las Hermanas encontraron en Caldes de Malavella el lugar idóneo.
Inicialmente, el Centro acogió un total de 20 personas, pero pronto se incrementó la demanda y el número de ingresos llegó a los 190 el año 1960. Posteriormente, en los años 70, el Centro se convirtió en un colegio de educación especial, gracias al esfuerzo de las Hermanas Hospitalarias y al concierto suscrito con la Diputación de Barcelona.
En los 90, cuando el número de alumnos en la escuela empezó a disminuir, las Hermanas Hospitalarias iniciaron un proceso de transformación de la entidad hacia lo que hoy es el Centre Psicopedagògic Mare de Déu de Montserrat: un
conjunto de instalaciones dedicadas a la asistencia, en un entorno residencial, de discapacitados intelectuales adultos, tanto hombres como mujeres.